Los museos locales ante la COVID-19

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El 18 de mayo de 2020, con motivo del Día Internacional de los Museos, el diario Levante-EMV publicó este artículo con algunas reflexiones personales.

Los museos locales ante la COVID-19

Hoy, el Día Internacional de los Museos estaba llamado a celebrarse en torno a la concienciación sobre la importancia de los museos como medio para el intercambio cultural, el enriquecimiento de las culturas, y el desarrollo de la comprensión mutua, de la colaboración y de la paz entre los pueblos. Así se resume el lema que el Consejo Internacional de Museos (ICOM) ofrecía a todos los museos del mundo para la celebración de este año: «Museos por la igualdad: diversidad e inclusión».

Por desgracia, en la situación de pandemia mundial en la que vivimos por la COVID-19, ha sido inevitable que el debate estos días en el ámbito de los museos (al igual que en todos los sectores) sea el de cómo afrontar la actividad museística en esta nueva realidad a la que nos enfrentamos. En estas últimas semanas, los diferentes museos han estado preparando protocolos de reapertura, revisando los condicionantes de acceso, conservación, visita, seguridad laboral y salud para garantizar una óptima atención a la ciudadanía. Y es que las visitas a los museos tardarán en volver a la normalidad.

Ahora nos encontraremos con visitas a los museos en los que se tendrá que comprar la entrada online o por medios de pago electrónicos, utilizar elementos de autoprotección (mascarilla y solución hidroalcohólica), guardar la distancia interpersonal, no utilizar audioguías o folletos, y evitar el agrupamiento de visitantes, entre otras medidas de la nueva lógica en la que nos encontramos. Y a esta nueva situación tendrán que adaptarse también los museos locales repartidos por nuestro territorio que, en la mayoría de los casos, disponen de espacio y recursos limitados que dificultan esa adaptación.

Los museos locales tendrán que adaptarse también a una nueva realidad en el propio consumo cultural. En las próximas semanas, la ciudadanía tratará legítimamente (aunque tal vez de forma tímida al principio) de recuperar los espacios de sociabilidad y de ocio, y en ellos los museos locales deberán ocupar un espacio, si no central, sí importante. En este sentido, los museos de nuestras poblaciones, por pequeños que sean, tendrán la oportunidad de recuperar su centralidad como espacios culturales y de generación de identidad. Con sus necesarias adaptaciones en recorridos, actividades y propuestas divulgativas, los museos locales han de convertirse en la elección de la ciudadanía para recuperar su libertad, su ocio, su entretenimiento y, también, su socialización con el territorio.

Y, a su vez, los museos de ámbito local, que siempre han trabajado comprometidos con el territorio y la sostenibilidad, deberán plantearse definitivamente nuevas dinámicas de interacción para suplir la limitación de participantes en sus actividades y en la afluencia turística, y trabajar en canales de participación no presencial, así como la digitalización y puesta a disposición pública de sus recursos.

El reto, sin duda, es amplio, ambicioso y no exento de problemas y limitaciones. Pero los museos se han encontrado ante retos similares a lo largo de su historia y siempre han salido victoriosos. Los museos locales juegan con la ventaja de su íntima relación con la ciudadanía; una relación que, sin duda, saldrá reforzada de esta situación excepcional que estamos viviendo, así como saldrá reforzada la propia sociedad. En ello estamos.



José Martínez Tormo. Gestor cultural

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